La producción de gas de la República Argentina enfrenta un escenario desafiante: expertos estiman que el sector no ha explotado al máximo sus potencialidades debido a problemáticas en términos de infraestructura y transporte. De acuerdo con el ingeniero José Luís Sureda, desde 2004 la nación ha sufrido una caída abrupta de su producción de gas, agravada por crisis como la del 2012 con el incidente de Fukushima.
Es vital pensar en estrategias que garanticen un desarrollo equitativo del país ante un escenario en el que la Argentina se posicione como pionera en exportación regional y mundial de gas, mientras cuenta con una economía interna deprimida. El ingeniero Daniel Gerold, reconocido consultor energético, señala que es importante que el Estado instituya un Fondo de Estabilización para los combustibles, la electricidad y el gas natural; uno que permita subsidiar a actores determinados de la economía, en situaciones específicas.
Aunque el panorama a vísperas del invierno argentino no parece ser el mejor -y más considerando la crisis energética que enfrenta el escenario internacional-, Gerold denota que no todos los sectores económicos del país se encuentran en recesión; mientras que una buena parte de los consumidores residenciales y comerciales tiene problemas económicos, el sector industrial vive un nivel de productividad sustancialmente mejor al de 2019, y el sector agrícola reporta excelentes condiciones, con un precio de la soja que aumentó en un 120% en un año.