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Fraccionar tramos, una solución para acelerar la construcción del Gasoducto Kirchner

¿Fraccionar los tramos del Gasoducto Néstor Kirchner? o ¿contratar una sola empresa a cargo de la construcción? Es el dilema que muchos se han planteado acerca de esta obra pública.

Sin embargo, Antonio Pronsato, ex funcionario a cargo de ejecutar la construcción del Gasoducto Néstor Kirchner, justificó que la decisión de dividir los tramos beneficia en la aceleración de la construcción de la obra.

“A cada uno de los contratistas le puedes exigir una velocidad en un tramo. Puedes llegar a resolverla”, señaló.

Adicionalmente, el ex funcionario aseguró que la división consistiría en dos tramos de 220 kilómetros y uno de 120 kilómetros. “Cuando hicimos el GNEA tenía tramos de 300 kilómetros y aquel que lo hizo más rápido tardó un año y cinco o seis meses. Acá, en principio, era terminarlo el 31 de mayo del año que viene, para eso teníamos que dividirlo en zonas que pudieran darle mucha velocidad a la construcción”, explicó.

¿Una solución costosa?

Para Antonio Pronsato esta puede ser una solución costosa, sin embargo, el valor que resalta de este camino es el dominio que se tiene sobre la construcción.

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“Quizá es una solución de compromiso. Lo que se tiene es un mayor dominio sobre los contratistas. Si uno se atrasa no le puede echar la culpa al otro. La verdad es que creo que es una picardía que perdamos tiempo en no hacerlo”, comentó.

Pronsato ha sido una figura clave en la construcción de gasoductos en Argentina, construyendo casi 2500 kilómetros. “Como ingeniero el país me dio muchas realizaciones y me siento muy orgulloso. Por eso para mí este gasoducto no era una oportunidad, sino que era una obligación y una vergüenza que no estuviera hecho”.

Financiación privada

Por otro lado, El ministro de Economía, Sergio Massa, aseguró que se realizará la licitación del segundo tramo del gasoducto de Vaca Muerta en su mandato, el cual además contará con financiación privada.

Una estrategia que para el ex funcionario es pertinente, de cuerdo a su experiencia con la construcción del GNEA. “Cuando hicimos el estrecho le pedimos plata a los privados, hicimos un fideicomiso en el que pusieron todos los productores y se les devolvió en tiempo y forma. De hecho, dijeron que en ese año la mayor rentabilidad la habían tenido aportando en el estrecho”, indicó Pronsato.

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